domingo, 23 de marzo de 2014

miércoles, 19 de marzo de 2014

on/off/y algo entre ambos




El estereotipo es como los antiguos serenos: solo acudes a él si no tienes forma de entrar cuanto antes donde necesitas hacerlo. Solo que lo que produjo su extinción no fue el desarrollo de la paciencia, sino una mayor conciencia de la privacidad. El estereotipo sobre lo que África necesita permite llegar mucho antes a una conclusión, y sobre todo, hacerlo sin llamar a gritos a la propia conciencia. Y la consecuencia es que millones de personas en todo el mundo donan cada año dinero a múltiples ong para financiar hospitales, pozos, escuelas y equipación varia, -lo que es formidable- pero pocos han de preguntarse si acaso lo que podrían necesitar es simplemente que en cada casa europea hubiera un ejemplar del libro de Adam Hochschild El fantasma del rey Leopoldo, publicado en nuestro país por Península en 2002, y que narra cómo durante el reparto colonial del mundo en los siglos XIX y XX, el rey Leopoldo II de Bélgica saqueó el Congo, asesinando a diez millones de sus habitantes sin que, durante esos años, su imagen dejara de ser la de un monarca bueno, preocupado por su pueblo. Lo que, como tantos de los genocidas del siglo XX, por supuesto era. Si el humor es aparentemente el camino más injusto, por suave, para llegar a denunciar cómo nuestra visión de la precariedad es solo nuestra renuncia a buscar la llave que lo explica demuestra también que, allí donde no llega todo lo que una sociedad acomodada está dispuesta a no atender, pudiera hacerlo el sentido del ridículo.

http://www.africafornorway.no/