Sin que en la vida real e íntima uno tenga
más posibilidades de callarse a tiempo cuando debe, el silencio en publicidad a
veces se prohíbe a sí mismo con resultados estruendosos que subir a lonas como
esta: mientras se exhibe que lo importante son los clientes, y por eso se pierden
3.845 millones de euros en 2016, en la prensa los pequeños accionistas demandan
al banco por hundir deliberadamente el precio de la acción y su nuevo
presidente dice no desestimar la fusión o venta de la entidad. Uno no imagina
un consejo de administración sumido en semejante abismo debatiendo si quitar
por pudor la lona, y quizá es porque clamar “con paso firme” desde la tullidez se
parece demasiado al mensaje clásico con que los productos financieros han
amputado los ahorros a millones de pensionistas recientemente. O porque se paga
a alguien como el gran Gasol en la ilusión de ver en sus habilidades las
inexistentes en la gestión del banco. Hace tanto que mentir aguanta al sol años
y años, que el tamaño en que se miente es solo un grano más.
miércoles, 26 de abril de 2017
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario